Redes sociales e Internet ¿amigas o enemigas?

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Autora: Eva M. Carretero García

La aparición de las nuevas tecnologías, y especialmente las Redes Sociales e Internet, han modificado nuestras vidas a todos los niveles, por lo tanto es lógico pensar que también influirán en las conductas autolesivas y suicidas, pudiendo esta asociación ser positiva o negativa dependiendo del uso que se les de a las mismas. Por este motivo es imprescindible aprender a sacar el máximo partido a las tecnologías 2.0 para minimizar sus efectos perjudiciales, y poder extraer el mayor beneficio posible a los recursos que nos ofrecen en materias de salud y prevención, aprovechando el mundo de posibilidades que nos abren para la detección y prevención de la autolesión y el suicidio.

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La Supervisión Clínica o cómo alcanzar la excelencia en el abordaje de la conducta suicida

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Autora: ESTHER GONZÁLEZ JIMÉNEZ

La supervisión clínica es una herramienta de gran riqueza para mejorar nuestra pericia como profesionales de la psicología, sea cual sea el ámbito profesional y el colectivo de personas con el desarrollemos nuestra labor; pero lo es más aún en el ámbito de la conducta suicida, ya estemos hablando de atender a personas con ideación o tentativas suicidas, de orientar a su entorno, o en último extremo, de atender a familiares en duelo por suicidio. Y esto es así debido a que a día de hoy la formación en conducta suicida que se imparte en el ámbito académico (pregrado) es escasa o nula y los futuros psicológos/as salen sin unas nociones básicas de cómo desenvolverse profesionalmente ante este tipo de casos. Con este podcast se pretende fomentar la reflexión sobre este aspecto y poner en valor la importancia de la supervisión como medio de mejorar nuestra práctica profesional y poder ofrecer una atención de calidad, a la par que nos cuidamos como profesionales.

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Podcast: El duelo por suicidio y el asociacionismo

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Autora: Xisca Morell García

SE EXPLICARÁ BREVEMENTE EL PROCESO DEL DUELO POR SUICIDIO COMO EXPERIENCIA EN PRIMERA PERSONA Y COMO PRESIDENTA DE UNA ASOCIACION DE SUPERVIVENTES (AFASIB). ADEMÁS, SE DARÁ INFORMACIÓN SOBRE QUÉ SON LOS GRUPOS DE AYUDA MUTUA, DIFERENCIÁNDOLOS DE LOS GRUPOS TERAPÉUTICOS, Y EL SENTIDO DE LAS ASOCIACIONES DE SUPERVIVIENTES (QUÉ HACEMOS Y PARA QUÉ NOS SIRVE). FINALMENTE SE INCLUIRÁ UNA REFLEXIÓN SOBRE LA RESILIENCIA.

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Necesidades actuales en la Psicología y la Prevención de la Conducta Suicida

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Una mesa redonda en la que se pondrá de manifiesto, desde el punto de vista de diferentes profesionales, la capacidad de mejora que tiene la Psicología para hacer frente a este problema de Salud Pública.

Pilar Ruiz Costa, ganadora del reconocimiento #PeriodismoResponsable sobre el suicidio en la categoría local

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Palma de Mallorca, 10 de septiembre de 2021. El jurado de la primera edición del reconocimiento #PeriodismoResponsable sobre el suicidio ha otorgado a Pilar Ruiz Costa el primer premio en la categoría local, enfocada a los trabajos publicados en medios de comunicación de las Islas Baleares. La escritora, columnista en el Diario de Ibiza, se hace con el galardón por la columna ‘Saltar al vacío’, publicada en el citado medio el 12 de junio de 2021. Ruiz recibirá un diploma conmemorativo por visibilizar la problemática del suicidio desde el ámbito de los medios de comunicación. 

Formado por Nicole Haber Eterovich, responsable del Observatorio del Suicidio del Servicio Público de Salud de las Islas Baleares; Gabriel González Ortiz, periodista del Diario de Navarra y autor del libro Hablemos del suicidio. Pautas y reflexiones para abordar este problema en los medios; María de Quesada Herrero, periodista y autora del libro La Niña Amarilla; y Olga Fernández Castro, periodista especializada en salud, ganadora de los premios de periodismo del Instituto Roche y ASEBIO, el jurado ha reconocido el testimonio en primer persona de Ruiz Costa, la originalidad o la calidad redaccional ofreciendo una salida positiva al problema del suicidio. 

La columna, escrita con el corazón y basada en su experiencia personal, relata los problemas pasados de la autora, que como víctima de violencia machista pensó en quitarse la vida cuando su hija tenía dos años. Con un enfoque auténtico, Ruiz Costa pone en palabras un testimonio íntimo y reflexivo de su propia historia de superación sin tabúes ni anónimos. “Jamás osaría simplificar un drama así, pero sospecho que, detrás de muchos suicidios no está el querer morir, sino el querer dejar de sufrir y sufrimientos hay más que montañas”, expone la autora en su columna.

La columna ‘Saltar al vacío’ de Pilar Ruiz Costa puede leerse aquí. Al haber sido publicada en la versión premium, también puede leerse aquí.

Por otro lado, el jurado ha decidido conceder los accésit de la categoría local a dos candidaturas que visibilizan la problemática del suicidio entrevistando a personas especializadas en este tema. Inmaculada Saranova, periodista de Onda Cero Ibiza y Formentera, por las entrevistas a Nicole Haber, Xisca Morell y Guillermo Córdoba, y María José Real, subdirectora del Periódico de Ibiza y Formentera, por la entrevista a Oriol Lafau, coordinador de Salud Mental de Baleares, han merecido la gratitud del jurado y recibirán un diploma conmemorativo por sus trabajos.

El principal objetivo de este reconocimiento pionero, organizado por la Asociación de Profesionales en Prevención y Postvención del SuicidioPapageno’ y la Asociación de Familiares y Amigos Supervivientes por Suicidio de las Islas Baleares (AFASIB), es distinguir a los mejores trabajos periodísticos que visibilizan el problema del suicidio y ayudan a salvar vidas. Busca servir de estímulo para los periodistas en la búsqueda de un cambio de actitud en las redacciones, alejado del efecto contagio y centrado en informar del suicidio con responsabilidad. 

Las siguientes entidades colaboran en la primera edición de este reconocimiento: Sindicat de Periodistes de les Illes Balears (SPIB), Col·legi Oficial de Psicologia de les Illes Balears (COPIB), Obra Social laCaixa, Teléfono de la Esperanza de Islas Baleares, la Oficina de Salut Mental de les Illes Balears, 3 Salut Mental, Teléfono de la Esperanza de Sevilla, Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) y la Asociación En Primera Persona.

Luisa Pérez y Javier Monterde, ganadores del reconocimiento #PeriodismoResponsable sobre el suicidio en la categoría nacional

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Palma de Mallorca, 10 de septiembre de 2021. El jurado de la primera edición del reconocimiento #PeriodismoResponsable sobre la conducta suicida ha otorgado a la periodista Luisa Pérez y al realizador Javier Monterde el primer premio en la categoría nacional. Con el reportaje ‘Suicidio: una decisión sin vuelta atrás’, emitido el 11 de febrero de 2021, los profesionales de Radio Nacional de España estrenan el palmarés de este galardón, que busca la prevención del suicidio desde el ámbito de los medios de comunicación. Ambos recibirán un diploma conmemorativo.

Formado por Nicole Haber Eterovich, responsable del Observatorio del Suicidio del Servicio Público de Salud de las Islas Baleares; Gabriel González Ortiz, periodista del Diario de Navarra y autor del libro Hablemos del suicidio. Pautas y reflexiones para abordar este problema en los medios; María de Quesada Herrero, periodista y autora del libro La Niña Amarilla; y Olga Fernández Castro, periodista especializada en salud, ganadora de los premios de periodismo del Instituto Roche y ASEBIO, el jurado ha distinguido la calidad, la atención a cada detalle o la fusión de los recursos para concederles el primer premio en la categoría nacional. Una joya periodística, en palabras del jurado, que inaugura el palmarés de este reconocimiento pionero.

El trabajo de Luisa Pérez y Javier Monterde aborda desde la raíz la problemática del suicidio. Aporta abundantes datos para ayudar a los oyentes a acercarse a la oculta realidad del suicidio, cuenta con el testimonio de varios especialistas en la conducta suicida y con varias personas que han perdido a un ser querido por suicidio, añade pautas para poder detectar señales de alerta, desmiente algunos mitos o incluye un buen número de recursos de prevención como teléfonos o páginas webs que ayudan a dar visibilidad al suicidio y a salvar vidas.

El reportaje ‘Suicidio: una decisión sin vuelta atrás’ puede escucharse aquí.

Por otro lado, el jurado ha decidido conceder tres accésit a trabajos que visibilizan y ayudan a prevenir este problema de salud pública desde una perspectiva específica: la vejez, la adolescencia y la vida después de perder a un ser querido por suicidio. El reportaje titulado ‘Suicidio y vejez, la adelantada muerte tardía’ (disponible en la versión impresa), de Rafael J. Álvarez, periodista de EL MUNDO; el reportaje ‘Suicidios en la adolescencia’, de Ana Lucas, periodista de La Opinión de Murcia y el reportaje ‘Suicidio, la muerte invisible’ (disponible en dos partes en la versión impresa: primera y segunda), de las periodistas de La Nueva España Sandra F. Lombardía y Elena F.-Pello, consiguen el reconocimiento del jurado y un diploma conmemorativo.

El principal objetivo de este reconocimiento pionero, organizado por la Asociación de Profesionales en Prevención y Postvención del SuicidioPapageno’ y la Asociación de Familiares y Amigos Supervivientes por Suicidio de las Islas Baleares (AFASIB), es distinguir a los mejores trabajos periodísticos que visibilizan el problema del suicidio y ayudan a salvar vidas. Busca servir de estímulo para los periodistas en la búsqueda de un cambio de actitud en las redacciones, alejado del efecto contagio y centrado en informar del suicidio con responsabilidad. 

Cada suicidio es un fracaso social y los medios de comunicación tienen un potencial preventivo inigualable en el combate contra el estigma. Con esta actividad queremos reconocer el buen trabajo de los profesionales que hacen periodismo de salud con mayúsculas”, apunta Daniel López, presidente de Papageno. Junto a Xisca Morell, presidenta de AFASIB, quieren agradecer a los casi 50 periodistas que presentaron su candidatura su compromiso para ayudar a la prevención del suicidio, un problema que cada año se lleva la vida de más de 3.000 personas en España.

Las siguientes entidades colaboran en la primera edición de este reconocimiento: Sindicat de Periodistes de les Illes Balears (SPIB), Col·legi Oficial de Psicologia de les Illes Balears (COPIB), Obra Social laCaixa, Teléfono de la Esperanza de Islas Baleares, la Oficina de Salut Mental de les Illes Balears, 3 Salut Mental, Teléfono de la Esperanza de Sevilla, Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) y la Asociación En Primera Persona.

Sonidos de Psicología: hablemos del suicidio (Colegio de la Psicología de Madrid)

Tiempo de lectura: 2 minutos

Sonidos de Psicología, producido por el Colegio oficial de la Psicología de Madrid, es un espacio que nos acerca a temas de actualidad a través de la psicología y que nos ayuda a entender, quizá, el por qué de lo que vemos, oímos, y muchos más. Una ventana psicológica hacia los temas más actuales de nuestro alrededor. Un lugar para descubrir el por qué más humano de lo que sucede. Donde personas, historias y expertos hablan de la psicología del mundo real.

ESCUCHARLO A TRAVÉS DE IVOX

¿Por qué nos suicidamos? Reflexiones para la prevención y el abordaje del suicidio como problema social – Daniel J Lopez

Reflexión sobre el fenómeno suicida, sus causas y su prevención a través de la comparación de dos libros, la novela de ficción de Dalton Trumbo «Johnny cogió su fusil» y la autobiografía «La escafandra y la mariposa» de Jean-Dominique Bauby. Estos dos libros representan dos opciones diferentes ante problemas vitales similares que ayudan al autor del podcast a reflexionar sobre la conducta suicida y sus motivaciones

 

¿Cómo surge la idea suicida en la mente del ser humano? – Miguel Guerrero

Podemos y debemos acercarnos a comprender el origen y desarrollo de la idea suicida en la mente del ser humano, dado que su mayor conocimiento orienta y ayuda a prevenir suicidios. En este podcast, se pretende dar respuesta a qué variables psicológicas están implicadas en la génesis y desarrollo de la ideación suicida, así como qué factores nos protegen de la misma. Como guía explicativa nos apoyaremos en el modelo de tres pasos de Klonsky & May y en sus tres conceptos básicos y claves para entender la ideación suicida: sufrimiento, desesperanza y conexión con la vida. 

Epidemiología del suicidio. Los datos del silencio – Luis Fernando López Martínez

Bienvenidos al estreno de Sonidos de Psicología y del proyecto Hablemos de…Suicidio. A lo largo de este PODCAST se encontrarán las datos aportado por el INE en el año 2019 de fallecimientos por suicidio y sobre la morbimortalidad producida por la conducta suicida. Se elabora un recorrido de la necesidad de una mirada y atención integral pública para prevenir la alta tasa de suicidios como desafíos y retos futuros en la urgente línea estratégica de prevención del fenómeno. Muchas gracias por escucharnos.

El grito de los sin nombre: estigma, salud mental y suicidio

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Sobre los regalos inesperados

Autor: Daniel Jesús López Vega, coordinador de papageno.es

Ayer amaneció como un día normal. Pero hay veces que la vida te hace un regalo inesperado (o varios), de esos que te hacen volver a creer que el cambio social es posible. Y todo empezó, como en muchas ocasiones anteriores en mi vida, gracias a mi naturaleza humana que persiste en su necesidad de manifestarse a través de mis errores.

Entre mi largo listado de defectos está el de no leer los correos electrónicos y contestar que «Sí» a todo tipo de peticiones. No me detengo a leer el contenido cuando me lo envían personas que estimo. Y ese fue el caso. Antonio Vergara, una persona a la que admiro por su trayectoria como médico y persona (todos necesitamos nuestros mitos), nos invitaba en nombre del Ayuntamiento de Cádiz y el movimiento «Marea Blanca» a un acto sobre estigma y salud mental. Participaríamos María Jesús de León, Presidenta de la Asociación Andaluza de  Supervivientes por el Suicidio de un Ser Querido «Ubuntu», y yo, como representante de la Asociación de Profesionales en Prevención y Postvención de la Conducta Suicida «Papageno». 

En principio nos pareció una buena oportunidad para hablar sobre el suicidio en un acto que reivindicaba la voz de familiares y afectados por el estigma que rodea a todos los problemas de salud mental. Y pongo afectados por el estigma porque creo firmemente que muchas veces es la verdadera causa del sufrimiento de las personas con problemas de salud mental. Muchas de ellas, podrían tener una vida absolutamente plena si la sociedad aprendiera de una vez por toda a valorar la diversidad y lo diferente como parte de su identidad y dejar sus prejuicios de lado. Prejuicio que de forma extraña nos divide en «nosotros» por un lado y «ellos» por otro como si fuera tan fácil establecer una línea que separara lo normal y lo anormal. Como si ese pretendido estado de normalidad fuera una vacuna para no cruzar la delgada línea roja que separa la cordura de la locura.

Cádiz: más cerca del paraíso

Hace años un compañero de trabajo onubense me decía desde la lucidez que da ver las cosas desde fuera que en Cádiz se estaba acostumbrado a sufrir. Un sufrimiento que tiene su mayor exponente en el desempleo. Lleva décadas castigando esta zona y seguramente se ha convertido en la mayor lacra de esta provincia en la que parece acabar Europa y que provoca diferencias socioeconómicas con importantes consecuencias. Siempre me pareció paradójico que un sitio donde uno se acostumbra a sufrir fuera un destino de turismo tan exitoso y donde tantas personas vienen a jubilarse o tienen segundas viviendas. 

Sin embargo, siempre he amado Cádiz. Demasiadas veces estamos tan acostumbrados a no valorar lo que tenemos que no somos capaces de admirar la belleza que nos rodea. El lugar donde se celebró la actividad fue el Castillo de Santa Catalina. Y en una tarde-noche de buen tiempo, después de la ola de calor que hemos sufrido y de los nubarrones emocionales del tema afgano, donde de nuevo ganaron «los malos», el día nos regaló un hermoso paisaje con el Balneario de fondo y las hermosas vistas desde el Castillo.

Y mi amor por esta tierra no se limita a sus paisajes. Siento también cierta responsabilidad en mejorarla, en realizar mi pequeña aportación para sentirme parte de ella. Ayer María Jesús y yo recordábamos que dentro de un par de meses se cumplirá el segundo aniversario del nacimiento de nuestro primer Grupo de Ayuda Mutua en Cádiz. Dos años compartiendo el sueño de ir creciendo y que con un poco de suerte se traducirá en la consolidación de nuestro grupo de Sevilla y la apertura próxima de los de Jaén y Córdoba.

Una tarde-noche de «locos»

Si bien es cierto que la mayoría de palabras relacionadas con problemas mentales han terminado teniendo un sentido peyorativo, el término loco tiene un sentido ambiguo. Para mí, se relaciona con ser diferente, partir la norma, ser creativo o divertirse desmesuradamente. Quizás pueda parecer que frivolice sobre el tema, pero la normalidad me aburre e incluso me parece un poco patológica.

Por eso ayer pasamos una tarde-noche de «locos».  Jamás había visto hablar de temas tan serios en un ambiente lúdico que supo combinar el respeto por temas tan dramáticos. La idea es que la meta es siempre la búsqueda de la felicidad y no exclusivamente huir del sufrimiento. Y todo ello protagonizado por las personas afectadas y sus familiares que tuvieron la oportunidad de hablar en primera persona y que pudieron GRITAR a los cuatro vientos que si hay algún problema, no es padecer un trastorno sea del tipo que sea, sino la extraña costumbre de patologizar y estigmatizar lo diferente.

Y allí entre impactantes testimonios de afectados y sus familias, música y actuaciones de personas unidas con un único fin, uno piensa que la vida es más justa, pese a no ser ajenos a que lo de ayer fue solo un oasis en el desierto que atraviesan muchas personas para los que la vida es una carrera de obstáculos por el estigma.

La magia de la palabra y del silencio cuando permite el encuentro entre personas

En esta ocasión nos tocó hablar los últimos. Siempre me produce pudor hablar en actos donde participan afectados por la pérdida de relevancia de mi discurso profesional frente a la riqueza emocional de sus experiencia y reivindicaciones. Me resulta complicado no ser estúpidamente paternalista con personas cuyo recorrido en la vida dan mucho más para aprender de ellas que para enseñarles nada.

Cuando hablamos, no hubo música, como la que acompañó a otras intervenciones. Imagino que aún no estamos preparados para hablar del suicidio escuchando los acordes de una guitarra o un piano de fondo. Todo llegará.

Y cuando terminé mi intervención la noche aún me deparó tres sorpresas. La psicología humanista habla del encuentro entre personas como un estado de plena cercanía que se da entre dos personas que parten toda las barreras comunicativas y que permiten a cada una ser quien es y mostrarse. Suelen ser momentos únicos que yo he tenido la suerte de vivir en el transcurso de mi profesión, pero que ya casi había olvidado. 

Pues ayer viví tres. El primero escuchando las palabras de María Jesús de León. Cuando intervino me recordó los motivos por los que abandoné mi espacio de confort y me involucré en el proyecto de papageno.es, un proyecto hecho por «locos» y para «locos» hecho con más ilusión y trabajo que fondos. A ella la conozco desde hace dos años, pero ayer me di cuenta de la suerte de que se cruzara en mi vida y me permitiera hacer esta parte del trayecto juntos. Ubuntu, sin duda, está en buenas manos, y le deseo y auguro a partes iguales el mejor de los futuros. A parte de sus habilidades comunicativas, hizo un alarde de coraje y valor para mostrarse tal cual es, con toda la crudeza que eso supone. Gracias.

El segundo fue con Verónica. Verónica aún no lo sabe, pero también es una persona especial.  Ella no habló, pero en su silencio se le entiende todo. También la conocí gracias a los grupos de ayuda mutua y a pesar de mi deseo de mantenerlos en la esfera de lo profesional, me resultaría difícil entender mi vida ahora sin ella. A pesar del revés que le dio la vida ella es pura alegría, eso sí con el trasfondo de dolor que acompaña siempre a la pérdida de seres queridos de una forma tan dura. Ella está siempre ahí, conciliadora, ilusionada, dispuesta a bromear con la que sufre o a escucharla. Tomando lista cada día de quién habla y quien calla en nuestros grupos de WhatsApp, porque sabe que la fuerza del grupo está en la preocupación por cada uno de sus eslabones. Gracias.

El tercero fue con Nuria, compañera de papageno.es y de vida. A ella sí la conozco desde hace muchos años. A veces cuando estoy con ella, soy capaz de rememorar el olor del azahar de los naranjos sevillanos que dieron sombra a nuestros primeros encuentros. Mi psicóloga y médica para el alma de cabecera. Llevamos tanto tiempo juntos que ya no nos hace falta hablar mucho para saber que ayer fue un día también importante para nosotros como pareja. Espero que esta aventura nos una aún más y nos abra nuevas oportunidades para seguir aprendiendo juntos. Gracias.

Y así acabó la jornada. Y aunque no asistieron también estuvieron presentes el resto de miembros de nuestros grupos de ayuda mutua y los que un día decidieron abandonarnos sin saber que siempre estarían con nosotros, porque alguien no muere si no hay olvido. 

Esta entrada de blog ha sido muy personal, pero necesitaba expresarlo. Espero que a ti te sirva de algo. Si has llegado hasta aquí imagino que te ha interesado, por lo que me tomo la licencia de añadir el vídeo de nuestra participación en la jornada. GRACIAS.

Una oportunidad para la prevención: COVID-19 y tasas de suicidio

Tiempo de lectura: 4 minutos

Autora: Susana Al-Halabí (Departamento de Psicología, Universidad de Oviedo).

COVID-19 COMO DESAFÍO A LA SALUD MENTAL

Foto de Anna Shvets en Pexels

Durante los primeros meses del confinamiento nos encontrábamos (y aún nos encontramos) ante una situación sin precedentes que suponía un verdadero desafío para todas las personas, particularmente para aquéllas en situaciones de vulnerabilidad y con presencia de factores de riesgo para problemas de salud mental. Parecía razonable pensar que el aislamiento, la incertidumbre, las dificultades económicas o la presencia de estrés podrían desembocar en un ascenso de las cifras de muertes por suicidio. No estaba claro si ese aumento se produciría a corto o largo plazo, pero sí que la comunidad sanitaria y científica debía estar preparada para un periodo desafiante. Paralelamente, se recomendaba evitar la idea de fusionar automáticamente el deterioro de la salud mental y la presencia de suicidio, tratando de disminuir el estigma, el uso de un lenguaje alarmista y la sensación de desesperanza de la población. Más aún, se presentaba este periodo como una ocasión para la cohesión social y la activación de factores de protección, como el apoyo social o la provisión de información fiable sobre la disponibilidad de ayuda para situaciones de crisis.

Tras un año de elucubraciones, el pasado mes de mayo se publicaba el primer estudio internacional con datos recogidos en veintiún países. Este estudio colaborativo, firmado por decenas de autores de reconocido prestigio y publicado en la revista The Lancet, arrojaba un dato claro: no se ha registrado un incremento en las tasas de suicidio durante los primeros meses de la pandemia. ¿Qué interpretación ofrecen los autores sobre este resultado? En primer lugar, el incremento auto informado de los niveles de ansiedad, depresión y pensamientos de suicidio no parece haberse traducido en un aumento correlativo de la muerte por suicidio, al menos en los países que formaron parte del estudio. La rápida implementación por parte de los gobiernos y otras instituciones oficiales de nuevas vías de acceso a los servicios de salud mental parece haber constituido un aspecto crucial en la prevención del suicidio. En segundo lugar, se han puesto en marcha diversos factores de protección, como la presencia de un sentimiento colectivo de comunidad, el apoyo a personas vulnerables a través de las nuevas tecnologías, o la permanencia de largos periodos de tiempo acompañados en el hogar, reduciendo así el estrés y la sensación de aislamiento y vacío. Finalmente, la mayoría de los gobiernos de los países del estudio han tomado medidas para paliar la previsible crisis económica, dotando de recursos económicos a muchas familias que, de no haber podido disponer de estas ayudas, contarían con importantes factores de riesgo. Con todo, los autores permanecen atentos a los posibles cambios que puedan producirse en los próximos meses y advierten de la necesidad de seguir garantizando los esfuerzos políticos y comunitarios que podrían haber sido los responsables de las bajas tasas de suicidio.

LA NATURALEZA CONTEXTUAL DE LA CONDUCTA SUICIDA

Foto de Startup Stock Photos en PexelsEsta situación también nos permite hacer una reflexión acerca de la naturaleza contextual de la conducta suicida, que no emergería automáticamente en forma de “síntoma” derivado del incremento de los problemas de salud mental, sino que se presentaría como un fenómeno complejo, multidimensional y multifactorial, en el que participan simultáneamente realidades de diferente tipo y orden (culturales, sociales, institucionales, psicológicas, éticas, etc.). Parece, por tanto, que no cabría una interpretación causal lineal, sino que habría que entender las conductas suicidas en los contextos biográficos de las personas, en la presencia de “sentido” en su sufrimiento y en la vivencia particular de sus dificultades. No se trataría, entonces, de reparar supuestas “averías” en el psiquismo, sino de dotar a las personas de recursos que permitan mejorar su acceso a los servicios sanitarios en situaciones de crisis, reducir la presencia de factores de riesgo y potenciar los factores de protección. Así mismo, compartir la preocupación, apoyar en los momentos de desesperanza, informar correctamente sobre los servicios de ayuda disponible, sensibilizar a la población acerca de la necesidad de dar apoyo social, derribar el estigma asociado a la conducta suicida y compartir la responsabilidad de los cuidados de las personas vulnerables, parecen estrategias valiosas para contener las tasas de suicidio.

NECESIDAD DE ACTUACIÓN

Surge la oportunidad de poner en marcha, más que en ningún otro momento, las estrategias de prevención del suicidio. Más aún, la implicación de todos y cada uno de los agentes de la sociedad y de todos los profesionales sanitarios es esencial. No podemos mirar hacia otro lado. Es hora de actuar.

Etiología del suicidio en España: el prólogo español de «El Suicidio» de Durkheim

Emile Durkheim
Tiempo de lectura: 4 minutos

Etiología del suicidio en España

En el año 1928 Don Mariano Ruiz-Funes, Catedrático de Derecho penal en la Universidad de Murcia, publicó “Etiologia del suicidio en España” como capítulo preliminar del clásico libro de sociología que él mismo tradujo: “El SUICIDIO” de E. Durkheim,

Muy necesario este capítulo ya que en la obra del francés hay muy escasas referencias a lo que acontecía en este país. Esta carencia se debe a que, mientras en Europa se recogían datos desde el año 1841, en España se empezaron a recoger datos de manera especifica en 1906. Cuando el libro se publicó por vez primera en 1897, aún no había datos específicos sobre lo que aquí sucedía. Se recogían el número de suicidios pero no con todos los datos que se estableció en la Real orden de 8 de septiembre de 1906.

De hecho, el autor francés encuentra que en todos los países la mujer se suicida cuatro o cinco veces menos que el hombre excepto en España, donde es solo la mitad. Escribe en un claro pie de pagina “Aparte de que la exactitud de la estadística española nos deja escépticos, España no es comparable a las grandes naciones de la Europa central y septentrional”. Por otra parte en escritos previos Morselli sobre la misma cuestión, no apunta a nuestra chapucera estadística decimonónica sino a “una fuerte tendencia al suicidio de la mujer española, producto de la fortaleza de su carácter, que la aproxima mucho al sexo masculino”.

Cuando se publicó la traducción al castellano en la edición del 1928 ya se contaban con esos datos específicos del suicidio. Y los incluyeron.

En el capitulo preliminar se pueden leer frases que, aunque escritas hace cien años, pueden referirse a los conocimientos actuales:

-“el alcoholismo es un factor de consideración en la criminalidad y en el suicidio, pero ambos fenómenos tienen una causalidad más extensa y más compleja.”

– Cuando buscan el factor racial en el suicidio (hablamos de una Europa anterior a la segunda guerra mundial) dicen “la tendencia al suicidio es de dudosa transmisión por herencia”. En ese aspecto, con todos los avances técnico científicos, seguimos en el mismo punto.

– Sobre el tema recurrente del efecto llamada, el efecto Werther que ha hecho silenciar los suicidios durante décadas dice: “El contagio del suicidio se produce por la propaganda; y la mayor eficacia de ella se logra por la prensa. Este es un postulado cierto, y, no obstante, la experiencia no lo confirma. Francia e Inglaterra tienen mayores medios de publicidad y de difusión que Dinamarca y Sajonia, y, sin embargo, las últimas ofrecen un porcentaje más crecido de suicidios. Reafirma este hecho el carácter individual que reviste el contagio suicida y la dificultad de referirlo a factores sociales”.

 

Efecto Werther Vs Efecto papageno

Es decir, en el 1928 ponen en duda la célebre afirmación de que publicar sobre el suicidio lleva a la imitación del suicidio (señalar que el libro que produjo el efecto Werther se publicó en 1774, traducido al español en 1835).

Cien años después se sigue discutiendo sobre la idoneidad de hablar o callar sobre el suicidio. Si bien cada vez con menos fuerza para los partidarios de acallarlo y con indicaciones de la OMS sobre cómo informar del suicidio.

-Dada la actual situación económica no deja de ser interesante que señalen (el año anterior al crack de 1929): “El factor económico es transcendental … Buena copia de suicidios hallan su origen, más que en catástrofes morales, en convulsiones Industriales y mercantiles.”

– En datos la estadística de 1838 arrojaba un 1,6 de suicidios por millón de habitantes ; en 1859 12,2 por millón, y en el promedio del periodo 1883-1900 sube a 27,61 por millón. Sobre el sexenio 1906-1911 cuando ya se recogían datos específicos refiere el máximo de suicidios consumados, cometidos por varones en el año 1909, representado por la cifra de 987. Las mujeres aportan su máximum de suicidios consumados el año 1910, con la cifra de 312. Sumando ambos máximos obtendríamos 1299 muertes por suicidio en una población de 19.990.669 (1910) es decir algo menos de 65 por millón. Actualmente de la tasa es algo menor, de 77, 9 por millón.

 

Las reflexiones de D. Mariano Ruíz-Funes

Reproduciré textualmente los últimos párrafos del capitulo escrito por D. Mariano Ruiz-Funes por que algunas de las reflexiones que escribe aún hay que repetirlas a la sociedad actual. Parece que estamos siempre cegados por la novedad y nos cuesta aprender de nuestros mayores. Si bien las ideas son “modernas” (en nuestra sociedad postmoderna el pensar que la cultura cura es ingenuo), creo que merece la pena una reflexión sobre ellas.

El suicidio no es un producto de la cobardía, ni una escuela de la miseria, ni la reflexión en el mundo exterior de una tara psiquiátrica, ni un capricho oscuro de la naturaleza, que proyecta, con sus modalidades meteorológicas, el disgusto de la vida sobre la víctima. No se produce el suicidio porque la lucha por la vida imponga esfuerzos dolorosos, ni porque estén insatisfechas necesidades legítimas, sino porque ignoramos o desconocemos el límite ético de esas necesidades y no sabemos dotar de una finalidad ideal a nuestros esfuerzos, embelleciéndolos con el sólo afán de lograrlos.

Las sociedades actuales no padecen una gran miseria económica, sino una alarmante miseria moral. Esa miseria moral habrá que combatirla creando un sentido elevado del deber; educando a la voluntad; dando a la inteligencia, y a su alto y generoso esfuerzo, el valor primario que le corresponde en los pueblos civiles, creando el sentido de la responsabilidad, exaltando el sentimiento de la tolerancia y el libre y legítimo ejercicio de todas las ideas, fomentando la solidaridad humana sobre la base de la ayuda mutua y del mutuo respeto y comprendiendo que el progreso es una relación de integración entre las más varias actividades individuales, que sólo se alcanza por la libertad y por la cultura.”

 

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