Categoría el Salud mental

Día de Salud Mental: aprendiendo y compartiendo sobre el suicidio ¡Gracias!

Tiempo de lectura: 5 minutos

 

Día Mundial de la Salud Mental

El viernes 8 de octubre Cáritas Diocesana (Proyecto Ranquines) y la Universidad Pontifica de Salamanca, celebraron un acto con motivo del Día Mundial de la Salud Mental (10 de octubre). Participamos en dicho acto, María Quesada del Proyecto La Niña Amarilla  y Daniel J. López. de papageno.es, entre otros ponentes de diferentes ámbitos.

Toda una oportunidad para celebrar también el aniversario del Proyecto Ranquines que atiende a un colectivo de personas con diagnósticos de salud mental y problemas de exclusión social en la provincia de Salamanca. No en vano, este año, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) celebró este día conmemorativo con el lema: Salud mental en un mundo desigual. Atención de salud mental para todos: hagámosla realidad. 

La jornada fue inaugurada por la Decana de la Facultad de Psicología, Teresa Sánchez Sánchez y el coordinador del Proyecto Ranquines, Francisco Berbegal Vázquez, que presentó el proyecto y sus resultados desde su puesta en marcha.

 

Salud mental y suicidio la conjura de la normalidad

El encuentro entre profesional y testimonio en primera persona fue moderado por María José Fernández Guerrero, profesora de Psicopatología de la Facultad de Psicología de la UPSA.

Daniel J. López Vega, psicólogo y coordinador de papageno.es, participó en dicho encuentro con una ponencia, que con el título «Salud mental y suicidio: la conjura de la normalidad», reflexionaba sobre la importancia de señalar la errónea identidad del binomio suicidio-enfermedad mental. La tiranía de la normalidad se ha convertido en muchas ocasiones en la coartada para estigmatizar a las personas con conducta suicida. No deja de ser una forma hipócrita de esconder los problemas debajo de la alfombra. Porque el suicidio es un problema de salud pública que nos afecta a la sociedad en su conjunto. Supone un reto que debemos afrontar con honestidad, entendiéndolo como un problema complejo y con una importante vertiente social. Solo un abordaje que contemple a la persona de forma holística y desde lo multidisciplinar y una respuesta conjunta de la sociedad a diferentes niveles, puede ser el remedio a este fenómeno que se ha convertido en la mayor causa de mortalidad externa en España y que es fuente de enormes consecuencias emocionales y socioeconómicas. 

 

Testimonios en primera persona

La importancia de los testimonios en primera persona como protagonistas de la prevención del suicidio se ha mostrado como un elemento clave. En Salamanca, tuvimos la suerte de compartir mesa con María Quesada del proyecto «La Niña Amarilla».

María es una persona a la que puedes conocer desde hace poco tiempo y sentir que ha estado ahí desde siempre. Periodista y profesora de yoga ha reunido en un libro las experiencias de personas dañadas emocionalmente por conductas suicidas y que han regalado sus vivencias para servir de ejemplo a otras. 

María es empática, cercana, sensible y muy implicada. Cuenta su historia, cada vez, sin poder controlar sus emociones -¡Qué envidia!-. Lo hace de forma humilde porque no es ajena al dolor de otros, pero con una valentía que convierte cada acto en el que participa en un acto único. Una suerte compartir esta experiencia de aprendizaje de forma conjunta. un ejemplo de cómo de convertir un trabajo en un placer. Esperamos que la vida nos permita seguir haciendo el camino juntos. 

Pero María, no llegó sola. La acompañaba «O….», una de las personas a las que entrevistó para su libro. Aunque no participó directamente en el acto, su presencia fue todo un símbolo. Pese a su juventud, ya ha sufrido en sus carnes la pérdida de un ser querido, muy querido, por suicidio. Pero eso no es lo que la caracteriza. De pensamiento lúcido, es capaz de dar toda una lección de vida, sobre cómo hacer noble el término superviviente con el que nos referimos a los familiares y personas cercanas que han sufrido pérdidas representativas por este motivo. Su vivencia se construye desde la naturalidad y la inocencia que hace grandes a los jóvenes y desde la madurez de quien busca en la vida su propio camino, pese a todas las dificultades que ha afrontado y sigue afrontando.

Y su dolor no fue el único que compartimos. Este tipo de actividades ayuda a otras personas a contar sus experiencia. Durante el descanso, una persona nos relató una pérdida por suicidio cuando apenas era un niño. No puede controlar su profundo dolor pese a que hace años que ocurrió y tras haber pasado por un proceso terapéutico. 

Dos preguntas nacen de la oportunidad de haberlos conocido ¿Hasta cuándo el silencia que invisibiliza a los supervivientes por suicidio? ¿Y cuándo son adolescentes o jóvenes, que instrumentos debemos fomentar para atender sus necesidades? ¿Están los grupos de ayuda mutua preparados para acompañar a estos perfiles? Si ser superviviente puede tener un impacto emocional que trastoca la vida de la persona irreversiblemente, cuando se es joven se es doblemente vulnerable a estos efectos y a la falta de accesibilidad a recursos de salud mental. 

 

Salud mental y desigualdades sociales

Pueblo de Dios - En la mente de Ranquines

En la mesa redonda del final del acto, cuatro personas participaron en una exposición sobre salud mental y violencia contra la mujer. Una intervención inspiradora que presenta una visión desde las administraciones (Eva Mª Picado Valverde, diputada delegada del Área de Bienestar Social, Familia y Juventud de Salamanca) y desde la experiencia universitaria (Ana V. Torres García, psicóloga y profesora e investigadora del Departamento de Personalidad, Evaluación y Tratamiento Psicológico de la Universidad de Salamanca y profesora del Máster de Prevención en Violencia de Género)

La mesa fue moderada por Francisco Berbegal Vázquez. Francisco es una persona amable, entregada al proyecto que representa. Se ve que ama lo que hace y pone en cada una de sus acciones no solo la profesionalidad que le da su amplia experiencia, sino por la preocupación por el otro que debe velar aquel que dedica su vida al acompañamiento de otros. Y no está solo en su empeño. Le acompaña todo su equipo. Participa en la mesa Laura Ciudad Aguadero, psicóloga del Centro de Día de Salud Mental Ranquines. Expone los datos y casos que confirman una dura realidad de las personas a las que atienden y especialmente en el caso de las mujeres que sufren maltrato. Francisco, Laura y el resto de su equipo respiran ese aire de trabajo duro, pero entregado e ilusionado, que motiva a seguir ahí en la lucha pese a todas las dificultades. 

Para finalizar el acto, la vicedecana de la Facultad de Psicología, Beatriz Palacios Vicario, clausuró las jornadas. Desde papageno.es felicitamos a los organizadores por el éxito de la actividad y el cariño con la que fue realizada y esperamos que dicha clausura sea simplemente un hasta luego y que en el futuro podamos seguir estrechando lazos de colaboración que nos ayuden a todas las organizaciones implicadas a cumplir nuestros objetos sociales.

 

¡Gracias!

 

 

II Jornada de Actualización en Salud Mental (Salud mental, suicidio y violencia en la mujer)

Tiempo de lectura: 2 minutos

(Organizado por Cáritas Diocesana y UPSA)

08/10/21
Lugar: Auditorio San Juan Pablo II y Virtual

La Facultad de Psicología y Cáritas Diocesana de Salamanca celebran la II Jornada de Actualización en Salud Mental. La jornada se realiza con motivo del cuarto aniversario del Centro de Día de Salud Mental ‘Proyecto Ranquines’ y del Día Mundial de la Salud Mental.

Las jornadas abordarán dos temáticas: el suicidio como trágica alternativa y la violencia hacia la mujer como causa de una enfermedad mental.

El encuentro servirá para sensibilizar a los futuros profesionales sobre la realidad actual de las personas con trastorno mental grave y reflexionar sobre cómo abordan esta realidad los profesionales actuales.

Las personas interesadas, deben rellenar previamente un formulario en el enlace directo.

El AFORO PRESENCIAL ESTÁ CUBIERTO, por lo que se podrán seguir de forma virtual a través de un enlace que se enviará una vez inscrito.

16:15 – 16:45 h. Inauguración

16:45 – 18:00 h. Conferencia y testimonio: ‘Salud mental y suicidio’

Modera: Mª José Fernández Guerrero

  • Ponente: Daniel J. López Vega. Responsable del Grupo de Conducta Suicida del Colegio de Psicología de Andalucía Occidental. Coordinador de Papageno, Asociación de Profesionales en Prevención y Postvención del Suicidio.
  • Testimonio: María de Quesada. Periodista, superviviente de suicidio y autora de La niña amarilla: relatos suicidas
    desde el amor.

18:30 – 19:45 h. Mesa redonda: ‘Salud mental y violencia en la mujer’

Modera: Laura Ciudad Aguadero

  • Ponente: Ana V. Torres García. Psicóloga. Profesora e investigadora del Departamento de Personalidad de Evaluación y Tratamiento Psicológicos de la Universidad de Salamanca; y profesora del Máster ‘Prevención en violencia de género’.
  • Ponente: Margarita Sáenz Herrero. Psiquiatra del Hospital de Cruces, del Servicio Vasco de Salud. Profesora asociada de Universidad del País Vasco.
  • Ponente: Eva M. Picado Valverde. Diputada delegada del Área de Bienestar Social, Familia y Juventud de Salamanca.
    19:45 – 20:00 h. Clausura
 

El grito de los sin nombre: estigma, salud mental y suicidio

Tiempo de lectura: 6 minutos

Sobre los regalos inesperados

Autor: Daniel Jesús López Vega, coordinador de papageno.es

Ayer amaneció como un día normal. Pero hay veces que la vida te hace un regalo inesperado (o varios), de esos que te hacen volver a creer que el cambio social es posible. Y todo empezó, como en muchas ocasiones anteriores en mi vida, gracias a mi naturaleza humana que persiste en su necesidad de manifestarse a través de mis errores.

Entre mi largo listado de defectos está el de no leer los correos electrónicos y contestar que «Sí» a todo tipo de peticiones. No me detengo a leer el contenido cuando me lo envían personas que estimo. Y ese fue el caso. Antonio Vergara, una persona a la que admiro por su trayectoria como médico y persona (todos necesitamos nuestros mitos), nos invitaba en nombre del Ayuntamiento de Cádiz y el movimiento «Marea Blanca» a un acto sobre estigma y salud mental. Participaríamos María Jesús de León, Presidenta de la Asociación Andaluza de  Supervivientes por el Suicidio de un Ser Querido «Ubuntu», y yo, como representante de la Asociación de Profesionales en Prevención y Postvención de la Conducta Suicida «Papageno». 

En principio nos pareció una buena oportunidad para hablar sobre el suicidio en un acto que reivindicaba la voz de familiares y afectados por el estigma que rodea a todos los problemas de salud mental. Y pongo afectados por el estigma porque creo firmemente que muchas veces es la verdadera causa del sufrimiento de las personas con problemas de salud mental. Muchas de ellas, podrían tener una vida absolutamente plena si la sociedad aprendiera de una vez por toda a valorar la diversidad y lo diferente como parte de su identidad y dejar sus prejuicios de lado. Prejuicio que de forma extraña nos divide en «nosotros» por un lado y «ellos» por otro como si fuera tan fácil establecer una línea que separara lo normal y lo anormal. Como si ese pretendido estado de normalidad fuera una vacuna para no cruzar la delgada línea roja que separa la cordura de la locura.

Cádiz: más cerca del paraíso

Hace años un compañero de trabajo onubense me decía desde la lucidez que da ver las cosas desde fuera que en Cádiz se estaba acostumbrado a sufrir. Un sufrimiento que tiene su mayor exponente en el desempleo. Lleva décadas castigando esta zona y seguramente se ha convertido en la mayor lacra de esta provincia en la que parece acabar Europa y que provoca diferencias socioeconómicas con importantes consecuencias. Siempre me pareció paradójico que un sitio donde uno se acostumbra a sufrir fuera un destino de turismo tan exitoso y donde tantas personas vienen a jubilarse o tienen segundas viviendas. 

Sin embargo, siempre he amado Cádiz. Demasiadas veces estamos tan acostumbrados a no valorar lo que tenemos que no somos capaces de admirar la belleza que nos rodea. El lugar donde se celebró la actividad fue el Castillo de Santa Catalina. Y en una tarde-noche de buen tiempo, después de la ola de calor que hemos sufrido y de los nubarrones emocionales del tema afgano, donde de nuevo ganaron «los malos», el día nos regaló un hermoso paisaje con el Balneario de fondo y las hermosas vistas desde el Castillo.

Y mi amor por esta tierra no se limita a sus paisajes. Siento también cierta responsabilidad en mejorarla, en realizar mi pequeña aportación para sentirme parte de ella. Ayer María Jesús y yo recordábamos que dentro de un par de meses se cumplirá el segundo aniversario del nacimiento de nuestro primer Grupo de Ayuda Mutua en Cádiz. Dos años compartiendo el sueño de ir creciendo y que con un poco de suerte se traducirá en la consolidación de nuestro grupo de Sevilla y la apertura próxima de los de Jaén y Córdoba.

Una tarde-noche de «locos»

Si bien es cierto que la mayoría de palabras relacionadas con problemas mentales han terminado teniendo un sentido peyorativo, el término loco tiene un sentido ambiguo. Para mí, se relaciona con ser diferente, partir la norma, ser creativo o divertirse desmesuradamente. Quizás pueda parecer que frivolice sobre el tema, pero la normalidad me aburre e incluso me parece un poco patológica.

Por eso ayer pasamos una tarde-noche de «locos».  Jamás había visto hablar de temas tan serios en un ambiente lúdico que supo combinar el respeto por temas tan dramáticos. La idea es que la meta es siempre la búsqueda de la felicidad y no exclusivamente huir del sufrimiento. Y todo ello protagonizado por las personas afectadas y sus familiares que tuvieron la oportunidad de hablar en primera persona y que pudieron GRITAR a los cuatro vientos que si hay algún problema, no es padecer un trastorno sea del tipo que sea, sino la extraña costumbre de patologizar y estigmatizar lo diferente.

Y allí entre impactantes testimonios de afectados y sus familias, música y actuaciones de personas unidas con un único fin, uno piensa que la vida es más justa, pese a no ser ajenos a que lo de ayer fue solo un oasis en el desierto que atraviesan muchas personas para los que la vida es una carrera de obstáculos por el estigma.

La magia de la palabra y del silencio cuando permite el encuentro entre personas

En esta ocasión nos tocó hablar los últimos. Siempre me produce pudor hablar en actos donde participan afectados por la pérdida de relevancia de mi discurso profesional frente a la riqueza emocional de sus experiencia y reivindicaciones. Me resulta complicado no ser estúpidamente paternalista con personas cuyo recorrido en la vida dan mucho más para aprender de ellas que para enseñarles nada.

Cuando hablamos, no hubo música, como la que acompañó a otras intervenciones. Imagino que aún no estamos preparados para hablar del suicidio escuchando los acordes de una guitarra o un piano de fondo. Todo llegará.

Y cuando terminé mi intervención la noche aún me deparó tres sorpresas. La psicología humanista habla del encuentro entre personas como un estado de plena cercanía que se da entre dos personas que parten toda las barreras comunicativas y que permiten a cada una ser quien es y mostrarse. Suelen ser momentos únicos que yo he tenido la suerte de vivir en el transcurso de mi profesión, pero que ya casi había olvidado. 

Pues ayer viví tres. El primero escuchando las palabras de María Jesús de León. Cuando intervino me recordó los motivos por los que abandoné mi espacio de confort y me involucré en el proyecto de papageno.es, un proyecto hecho por «locos» y para «locos» hecho con más ilusión y trabajo que fondos. A ella la conozco desde hace dos años, pero ayer me di cuenta de la suerte de que se cruzara en mi vida y me permitiera hacer esta parte del trayecto juntos. Ubuntu, sin duda, está en buenas manos, y le deseo y auguro a partes iguales el mejor de los futuros. A parte de sus habilidades comunicativas, hizo un alarde de coraje y valor para mostrarse tal cual es, con toda la crudeza que eso supone. Gracias.

El segundo fue con Verónica. Verónica aún no lo sabe, pero también es una persona especial.  Ella no habló, pero en su silencio se le entiende todo. También la conocí gracias a los grupos de ayuda mutua y a pesar de mi deseo de mantenerlos en la esfera de lo profesional, me resultaría difícil entender mi vida ahora sin ella. A pesar del revés que le dio la vida ella es pura alegría, eso sí con el trasfondo de dolor que acompaña siempre a la pérdida de seres queridos de una forma tan dura. Ella está siempre ahí, conciliadora, ilusionada, dispuesta a bromear con la que sufre o a escucharla. Tomando lista cada día de quién habla y quien calla en nuestros grupos de WhatsApp, porque sabe que la fuerza del grupo está en la preocupación por cada uno de sus eslabones. Gracias.

El tercero fue con Nuria, compañera de papageno.es y de vida. A ella sí la conozco desde hace muchos años. A veces cuando estoy con ella, soy capaz de rememorar el olor del azahar de los naranjos sevillanos que dieron sombra a nuestros primeros encuentros. Mi psicóloga y médica para el alma de cabecera. Llevamos tanto tiempo juntos que ya no nos hace falta hablar mucho para saber que ayer fue un día también importante para nosotros como pareja. Espero que esta aventura nos una aún más y nos abra nuevas oportunidades para seguir aprendiendo juntos. Gracias.

Y así acabó la jornada. Y aunque no asistieron también estuvieron presentes el resto de miembros de nuestros grupos de ayuda mutua y los que un día decidieron abandonarnos sin saber que siempre estarían con nosotros, porque alguien no muere si no hay olvido. 

Esta entrada de blog ha sido muy personal, pero necesitaba expresarlo. Espero que a ti te sirva de algo. Si has llegado hasta aquí imagino que te ha interesado, por lo que me tomo la licencia de añadir el vídeo de nuestra participación en la jornada. GRACIAS.

Salud mental y estigma: «Alegría por la diversidad»

Tiempo de lectura: 1 minuto

Acto «Alegría por la Diversidad» 18 de agosto Castillo Santa Catalina – Cádiz

El próximo 18 de agosto se celebrará en el Castillo de Santa Catalina en Cádiz un acto organizado por el Excmo. Ayuntamiento de Cádiz a través del «Plan Local de Salud» y la «Mesa de Salud Mental», con la colaboración de «Marea Blanca».

Se trata de un acto reivindicativo y lúdico cuyos objetivos son poner en valor el testimonio de personas afectadas, familiares y asociaciones que trabajan por la salud mental, reclamar mejoras en la atención socio-sanitaria y luchar contra la estigmatización de las personas con enfermedad mental. 

El acto presentado por, Ana Cristina Donoro y regido por Jorge Frontado, será inaugurado por el Alcalde de Cádiz, José María González y contará con la participación de la Concejala de Salud, Eva Tubío, y Antonio Vergara de «Marea Blanca Gaditana». 

Durante el acto se contará con testimonios de afectados, de TELÓN CÁDIZ INCLUSIÓN y de FAEM con música de fondo del “Pianista callejero”, de AFEMEN y AFEDU,  con música de fondo del guitarrista, Jorge Frontado y actuarán diferentes artistas, periodistas y  grupos de música. 

A la actividad también asistirán como invitados, María Jesús de León,  Presidenta de la Asociación Andaluza de Supervivientes por Suicidios de un Ser Querido UBUNTU y Daniel Jesús López, Presidente de la Asociación de Profesionales en Prevención y Postvención del Suicidio PAPAGENO.

Por motivos de seguridad frente al COVID-19 se requiere invitación para participar.

Una oportunidad para la prevención: COVID-19 y tasas de suicidio

Tiempo de lectura: 4 minutos

Autora: Susana Al-Halabí (Departamento de Psicología, Universidad de Oviedo).

COVID-19 COMO DESAFÍO A LA SALUD MENTAL

Foto de Anna Shvets en Pexels

Durante los primeros meses del confinamiento nos encontrábamos (y aún nos encontramos) ante una situación sin precedentes que suponía un verdadero desafío para todas las personas, particularmente para aquéllas en situaciones de vulnerabilidad y con presencia de factores de riesgo para problemas de salud mental. Parecía razonable pensar que el aislamiento, la incertidumbre, las dificultades económicas o la presencia de estrés podrían desembocar en un ascenso de las cifras de muertes por suicidio. No estaba claro si ese aumento se produciría a corto o largo plazo, pero sí que la comunidad sanitaria y científica debía estar preparada para un periodo desafiante. Paralelamente, se recomendaba evitar la idea de fusionar automáticamente el deterioro de la salud mental y la presencia de suicidio, tratando de disminuir el estigma, el uso de un lenguaje alarmista y la sensación de desesperanza de la población. Más aún, se presentaba este periodo como una ocasión para la cohesión social y la activación de factores de protección, como el apoyo social o la provisión de información fiable sobre la disponibilidad de ayuda para situaciones de crisis.

Tras un año de elucubraciones, el pasado mes de mayo se publicaba el primer estudio internacional con datos recogidos en veintiún países. Este estudio colaborativo, firmado por decenas de autores de reconocido prestigio y publicado en la revista The Lancet, arrojaba un dato claro: no se ha registrado un incremento en las tasas de suicidio durante los primeros meses de la pandemia. ¿Qué interpretación ofrecen los autores sobre este resultado? En primer lugar, el incremento auto informado de los niveles de ansiedad, depresión y pensamientos de suicidio no parece haberse traducido en un aumento correlativo de la muerte por suicidio, al menos en los países que formaron parte del estudio. La rápida implementación por parte de los gobiernos y otras instituciones oficiales de nuevas vías de acceso a los servicios de salud mental parece haber constituido un aspecto crucial en la prevención del suicidio. En segundo lugar, se han puesto en marcha diversos factores de protección, como la presencia de un sentimiento colectivo de comunidad, el apoyo a personas vulnerables a través de las nuevas tecnologías, o la permanencia de largos periodos de tiempo acompañados en el hogar, reduciendo así el estrés y la sensación de aislamiento y vacío. Finalmente, la mayoría de los gobiernos de los países del estudio han tomado medidas para paliar la previsible crisis económica, dotando de recursos económicos a muchas familias que, de no haber podido disponer de estas ayudas, contarían con importantes factores de riesgo. Con todo, los autores permanecen atentos a los posibles cambios que puedan producirse en los próximos meses y advierten de la necesidad de seguir garantizando los esfuerzos políticos y comunitarios que podrían haber sido los responsables de las bajas tasas de suicidio.

LA NATURALEZA CONTEXTUAL DE LA CONDUCTA SUICIDA

Foto de Startup Stock Photos en PexelsEsta situación también nos permite hacer una reflexión acerca de la naturaleza contextual de la conducta suicida, que no emergería automáticamente en forma de “síntoma” derivado del incremento de los problemas de salud mental, sino que se presentaría como un fenómeno complejo, multidimensional y multifactorial, en el que participan simultáneamente realidades de diferente tipo y orden (culturales, sociales, institucionales, psicológicas, éticas, etc.). Parece, por tanto, que no cabría una interpretación causal lineal, sino que habría que entender las conductas suicidas en los contextos biográficos de las personas, en la presencia de “sentido” en su sufrimiento y en la vivencia particular de sus dificultades. No se trataría, entonces, de reparar supuestas “averías” en el psiquismo, sino de dotar a las personas de recursos que permitan mejorar su acceso a los servicios sanitarios en situaciones de crisis, reducir la presencia de factores de riesgo y potenciar los factores de protección. Así mismo, compartir la preocupación, apoyar en los momentos de desesperanza, informar correctamente sobre los servicios de ayuda disponible, sensibilizar a la población acerca de la necesidad de dar apoyo social, derribar el estigma asociado a la conducta suicida y compartir la responsabilidad de los cuidados de las personas vulnerables, parecen estrategias valiosas para contener las tasas de suicidio.

NECESIDAD DE ACTUACIÓN

Surge la oportunidad de poner en marcha, más que en ningún otro momento, las estrategias de prevención del suicidio. Más aún, la implicación de todos y cada uno de los agentes de la sociedad y de todos los profesionales sanitarios es esencial. No podemos mirar hacia otro lado. Es hora de actuar.

Seminario web sobre comunicación y conducta suicida

Tiempo de lectura: 2 minutos

Este 23 de marzo el movimiento Obertament Balears de la alianza 3 Salut Mental (Gira-Sol, Es Garrover y Estel de Llevant) y papageno.es organizaron un evento de dos horas de duración con el título «Comunicación y conducta suicida».

La actividad tenía como objetivo reflexionar sobre la necesidad de mejorar las habilidades comunicativas relativas al relato en primera persona de conductas suicidas y salud mental en medios de comunicación.

Ángel Luis Mena, licenciado en humanidades, master en comunicación, gestión del conocimiento y periodismo y socio de papageno.es señaló la necesidad de hablar del suicido y otras conductas suicidas de forma responsable y evitando el sensacionalismo. Tras exponer la estrategia 1 de cada 4 sobre estigma en salud mental, Mena habló sobre el efecto Werther y Papageno. También se trabajaron los indicadores de calidad de diferentes organismos (OMS, Ministerio de Sanidad) sobre comunicación sobre suicidio en medios. Con la exposición de diferentes casos de buenas y malas prácticasm se debatió sobre el papel de los y las activistas en salud mental en el cambio cultural necesario para luchar contra el estigma relacionado al suicidio.

Por otro lado, Daniel J. López coordinador de papageno.es, psicólogo y máster en intervención psicológica en contextos de riesgo, trazó en su intervención conceptos básicos relativos a tres temas. Por un lado, habló de la importancia del storytelling como una estrategia de comunicación efectiva que apela a la emoción y que ayuda al cambio de actitudes en el largo plazo. Más tarde habló sobre aspectos relativos a la comunicación empática y a las habilidades sociales. Por último habló de estrategias persuasivas y del marketing social como instrumentos de cambio.

El webinar reforzó la idea en los y las participantes de la importancia de seguir luchando contra el estigma que existe alrededor de la salud mental y el suicidio y del protagonismo del relato en primera persona. Con esto, se establecen lazos para seguir colaborando entre ambas asociaciones que esperemos cristalicen en el desarrollo de proyectos conjuntos. 

 

 

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.

ACEPTAR
Aviso de cookies