Categoría el Grupo vulnerable

Ley Trans: Polémica y realidad

Tiempo de lectura: 4 minutos

Autoría: Francisco Rodríguez Laguna, psicólogo colaborador de www.papageno.es Febrero de 2021

Colectivo trans y conducta suicida

La Ley para la Igualdad Efectiva de las Personas Trans genera cierta polémica por impulsar la libre autodeterminación de género, demanda que, por cierto, lleva realizando el colectivo desde hace mucho tiempo y que viene a hacer justicia en un contexto relegado en muchas ocasiones a la
invisibilidad.

Es de justicia recordar, que este colectivo, es uno de los grupos de población más castigados en cuanto a la conducta suicida en toda su expresión se refiere.

Diversos estudios revisados coinciden en señalar que la conducta suicida es un problema mayor en la población LGBT,(lesbianas, gays, bisexuales y transexuales) presentando elevados índices de ideación e intento suicida. En conjunto, los estudios refieren en sus antecedentes tasas de intento de suicidio de entre 20 a 53% para jóvenes LGB (e.g. O’Donnell et al., 2011) y de entre 23 a 47% para el caso de jóvenes trans (e.g. Testa et al., 2012). En términos comparativos, se señala que la probabilidad de ideación e intentos de suicidio es de hasta siete veces mayor entre jóvenes LGBT que entre sus contrapartes heterosexuales (e.g. Diamond, 2013).

Personas trans y suicidio

Por su parte , y en lo que al suicidio consumado se refiere, Irwin et al. (2013) presentan la estimación de que los suicidios de personas gays y lesbianas podrían dar cuenta de 30% del total de suicidios de Estados Unidos de Norteamérica. Una mayoría de las investigaciones revisadas constatan la relación entre victimización de la población LGBT y comportamientos suicidas. Específicamente, el abuso físico, psicológico y
sexual, al que se ven expuestas las personas LGBT debido a su identidad de género y orientación sexual, fue asociado con suicidalidad (e.g. Corliss et al., 2010)

Asimismo, se observa que la falta de apoyo social tiene efectos nocivos en la salud mental de las personas LGBT, efectos que constituyen
en sí mismos factores de riesgo (e.g. Nemoto et al., 2011; Walls et al., 2008).
La revisión de otras investigaciones, presentan el antecedente de que la población LGBT muestra peores indicadores de salud mental (i.e. sintomatología depresiva y ansiosa, abuso de sustancias y conductas autolesivas) cuando se la compara con población heterosexual, y que estos indicadores constituyen, a su vez, factores de riesgo para el suicidio. Estos problemas de salud mental no serían inherentes a la orientación sexual e identidad de género sino que se explicarían por determinantes sociales de la salud (i.e. modelo de estrés de minorías discriminadas; e.g. Bocktinget al., 2013; Plöderl et al., 2008). (Fuente: artículo: Suicidio en poblaciones lesbiana, gay, bisexual y trans: revisión sistemática de una década de investigación (2004-2014), Rev Med Chile 2016; 144: 723-733

Libre determinación, expresión de género y despatologización trans

La libre determinación de la identidad y la expresión de género, junto a la despatologización de la transexualidad, son líneas básicas de una sociedad, que se denomina democrática y respetuosa con los derechos humanos.
Y en este sentido, los principios de Yogyakarta vienen a ratificar estándares legales internacionales vinculantes que los estados firmantes deben cumplir. Dichos principios, relativos a cómo se aplica la legislación internacional de derechos humanos a las cuestiones de orientación sexual e identidad de género, prometen un futuro diferente, donde todas las personas, nacen libres e iguales en dignidad y derechos.

Nueva ley trans

La norma que se pretende aprobar en nuestro país, reconoce que la solicitud de la rectificación registral de la mención del sexo, es decir, su cambio en el Registro Civil, «no precisa de más requisitos que la declaración expresa» de la persona. «El ejercicio de este derecho, en ningún caso
podrá estar condicionado a la previa exhibición de informe médico o psicológico alguno, ni la previa modificación de la apariencia o función corporal de la persona a través de procedimientos médicos, quirúrgicos o de otra índole, sin perjuicio del derecho de la persona interesada a hacer uso de tales medios».

En caso de aprobarse, las personas que quieran modificar su sexo legal, tendrán que indicar el nombre propio, si desean cambiarlo, y el sexo con el que se identifican «a fin de acreditar la voluntad de la persona interesada, así como los datos necesarios de la inscripción que se pretende
rectificar, y el número del documento nacional de identidad».
Además, prohíbe «el uso de terapias aversivas y de cualquier otro procedimiento que suponga un intento de conversión, anulación o supresión de la identidad de género, o que estén basados en la
suposición de que cualquier identidad de género es consecuencia de enfermedad o trastorno”.

Con todo ello, se busca desarrollar un modelo de salud que «tenga en cuenta la pluralidad de identidades, trayectorias y expresiones de género» y que incluya un «acompañamiento en todos los aspectos de la salud física y mental de la persona». Por lo expuesto con anterioridad, se debería realizar una adecuada pedagogía, libre de prejuicios y estereotipos, sobre las circunstancias, reivindicaciones, etc, del colectivo LGTBI, dirigida a la
población, abarcando desde los primeros años académicos , en aras de garantizar el respeto a los derechos humanos y favorecer el crecimiento personal, otorgando a dicho colectivo la visibilización necesaria para la consecución de una vida digna, libre de abusos y discriminación estas alturas, y en lo referido a la identidad de una persona, supone una barbaridad , seguir pensando que ésta puede ser asignada en base a su genitalidad al nacer.

Escuela de Madres y Padres para supervivientes por suicidio

Tiempo de lectura: 3 minutos
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Asociación Alhelí
papageno.es

Escuela de Madres y Padres

El 25 de enero tuvimos la oportunidad de disfrutar de una tarde para la reflexionar sobre la educación de nuestros hijos e hijas. Para ello, nos centramos en las situaciones de familias en duelo por suicidio. Esta actividad fue posible gracias a la colaboración entre la Asociación Alhelí y papageno.es 

La actividad nace de una necesidad manifiesta de personas en duelo. Estas necesidades señalan la dificultad de algunas familias para elaborar su duelo y compatibilizarlo con la experiencia de ser padre o madre.

La Escuela concentró a 48 personas de España, México, Argentina, Paraguay, Colombia y Ecuador. Algunas forman parte de los grupos que tiene la As. Alhelí en Málaga y de los desarrolla papageno.es junto a la Asociación Andaluza de Supervivientes por Suicidio de un Ser Querido «Ubuntu» en Cádiz, Sevilla, Jaén y Córdoba.

 

Introducción: maternidad y paternidad en situaciones de duelo por suicidio

Después de la introducción de Noelia Espinosa y Carmen Gálvez, integrantes de la Asociación Alhelí, presentaron su proyecto y experiencia personal. Posteriormente introdujeron una panorámica general de la actividad y del significado de la maternidad y paternidad en las situaciones de duelo por suicidio.

 

Habilidades para la vida: tolerancia la frustración y perseverancia

Durante la participación de Daniel López, psicólogo colaborador de papageno.es, se desarrollaron dos módulos diferentes. En el primero se describieron las claves del duelo por suicidio durante la infancia y la adolescencia. También se dialogó sobre la mejor manera de comunicar y hablar del suicidio con menores.

En la segunda parte se trataron conceptos generales sobre los estilos educativos y sobre aspectos relacionados con la educación relacionados con el bienestar emocional y el éxito en la vida adulta. En particular la disertación se centró en la tolerancia a la frustración y la capacidad de demorar el refuerzo y la perseverancia. 

Para explicar el concepto de demora del refuerzo, se utilizó el experimento de Walter Mischel denominado el test de la golosina. Este experimento clásico consiste en recluir a un niño/a pequeño/a de cuatro a seis años en una habitación frente a un dulce o una golosina. Si son capaces de pasar un rato (quince minutos) sin moverse de la silla frente al dulce y sin comérselo, el experimentador le dará un premio doble. Si no aguanta, puede tocar una campana y comérselo sin esperar, renunciando al premio. El experimento indica que las personas que tienen la capacidad de demorar la recompensa  son más capaces de lograr sus objetivos, gestionar sus emociones y vivir de manera más plena.

Ejemplo del Test de la Golosina

Por otro lado, también se trabajó sobre la necesidad de equilibrar la afectividad durante la infancia con el establecimiento de una normativa clara, sencilla y explícita. Con ese objetivo se tomaron los conceptos de amor paterno y materno de la teoría de Erich Fromm que apareció en su famoso libro «El arte de amar«.

La actividad concluyó con la definición del modelo de habilidades para la vida, definidas en 1993 por la Organización Mundial de la Salud. Este modelo define 10 habilidades que se defienden como esenciales en el bienestar emocional de los menores. 

Acabada la primera sesión, se plantea la posibilidad de realizar una actividad de varias sesiones, para darle continuidad a este proyecto, donde participen exclusivamente personas en duelo por suicidio. 

 

Si estás interesado/a en participar en la actividad ponte en contacto con: 

secretaria@prevencionsuicidio.school

Agradecemos a los miembros de ambas asociaciones y a todos los participantes por el regalo de haber aprendido juntos.

Lo que necesito de ti

Grupo de Ayuda Mutua para Supervivientes
Tiempo de lectura: 4 minutos

Carta abierta de una madre que perdió a su hijo por suicidio a los profesionales de salud mental y a la sociedad

Foto original realizada por Cristina Romero

Este texto ha sido elaborado por Cristina Romero en el desarrollo de una entrevista realizada por Daniel J. López, psicólogo colaborador de papageno.es, y tiene como objetivo reflexionar sobre las necesidades psicológicas de los supervivientes.

Escúchame

  • Necesito decir con libertad que mi hijo se suicidó, que sufrió mucho durante años y que tenía una enfermedad mental. Déjame hablar de él, apenas tengo oportunidades para hacerlo.
  • Necesito hablar sobre su suicidio, si lo presentía, si lo habló, si lo había intentado o si jamás pensé que lo haría.
  • Necesito saber que su muerte es real, tocarlo y abrazarlo por última vez.
  • Necesito contarte muchas cosas sin interrupciones y con paciencia. Ayúdame a contarte cómo sucedió todo, aunque me cueste hacerlo. Lo que ocurrió antes y justamente después de su muerte. Quiero contarte cómo lo vivo yo, no cómo debería vivirlo. Necesito que no reprimas mis llantos, que me permitas hablar, gritar e incluso perder el control. También que respetes mis tiempos.
  • Te necesito seguro, cálido, empático y capaz de ayudarme a afrontar mi dolor. No te muestres impotente, frío o frustrado. No necesito que me digas lo que tengo que hacer.
  • Necesito sentirte como persona que puedes ayudarme, percibir cómo sientes mi dolor, cómo entiendes lo que supone el suicidio de una de las personas que más quieres en el mundo. Así lograré conectar contigo. Necesito tu conocimiento profesional para darle claridad a mi oscuridad.
  • Necesito hablar de cómo me sentí abandonada y sola, de cómo perdí el sentido de mi vida, de mis ganas de morirme, de irme con él, de mi larga historia con el sentimiento de culpa, de mi total descontrol y del impacto que me produjo su muerte. Escucha atentamente mi relato y respeta cómo me siento. Luego, si lo crees conveniente, cuestiona mis creencias y ayúdame a transformarlo.
  • Necesito que me preguntes para entenderme no para modificar mi relato.
  • Necesito que me digas la verdad sobre mi duelo, que será largo, muy doloroso y sin consuelo. Que me pidas cosas que sean asumibles, que me orientes a afrontar mis emociones y que me digas que solo puedo ocuparme de lo que está a mi alcance.
  • Necesito que entiendas que soy una persona única e individual y que cada uno de nosotros somos diferentes y nos aproximamos de forma distinta a nuestro duelo y a la muerte de nuestros seres queridos.
  • Necesito que conozcas a mi familia, el contexto en que se produjo su muerte, que me conozcas a mí, a mi hijo y nuestra relación.
  • Necesito huir de los tópicos: “la vida sigue”, “verás cómo lo superas”, “el tiempo pasará y lo superarás”, “vas a salir más fuerte de este duelo”, “la vida te está poniendo a prueba”…

Ayúdame a afrontar y trasformar mi duelo

  • Ayúdame a entender lo que ocurrió, la intensidad de su alto grado de desesperación (por qué lo hizo) y a aceptarlo, superando el estado de shock en el que he estado durante años.
  • Ayúdame a transformar mi rabia –que me devora por dentro- en estar en paz conmigo misma y con los demás, ya que mi hijo ha sido una víctima más del sistema de Salud Mental.
  • Ayúdame a afrontar los aniversarios de su muerte, a hablar de ellos pero no a anticiparlos. Ayúdame a hacer entender a mi familia lo que necesito, enséñanos a acompañarnos.
  • Ayúdame a buscar distracciones para no pensar en él continuamente. Ayúdame a socializar. Perdí mis amistades.
  • Ayúdame a afrontar los trámites burocráticos de su muerte sin horror. Ayúdame a volver a creer en mí y en la vida.
  • Ayúdame a aprender a convivir con el dolor y a que se me restablezca un estado de equilibrio interno que me aporte habilidades para apreciar lo que tengo y no lo que he perdido.
  • Ayúdame a tenerlo cerca a través de sus cosas. Deja que su recuerdo me acompañe. No me pidas que abandone mi casa o que tire sus cosas. Así podré expresarte el amor y la gratitud inmensa que siento por haberlo tenido conmigo durante sus treinta años.

Ayúdame a que no vuelva a ocurrir

  • Necesito que entiendas mi rabia total hacia el sistema de Salud Mental y a la falta de prevención del suicidio, ya que las personas con enfermedad mental sufren mucho.
  • Ayúdame a que la muerte de mi hijo no ocurra en vano.
  • Ayúdame a reclamar más recursos para la Salud Mental, como centros de larga y media estancia y centros de día adecuados para ellos. Más inversión en investigación, más especialistas cualificados y sobre todo con compasión… Más protocolos de prevención del suicidio. También a concienciar de la ausencia de solidaridad social.
  • Ayúdame a implantar programas de inteligencia emocional en los colegios para detectar los problemas y ayudar a afrontarlos.
  • Ayúdame a hacer entender a los niños y hombres a pedir ayuda, a expresar cómo se sienten. Ayúdame a fomentar el apoyo familiar, escolar y social.

Mi grupo de ayuda mutua

  • Necesito participar en un grupo de ayuda mutua y compartir lo que siento con personas que tienen las mismas vivencias y que conocen tu dolor en primera persona.
  • Necesito recuperar el sentido del humor para ir superando este trauma.

Cristina es miembro de un grupo de ayuda mutua fruto de la colaboración de la Asociación Andaluza de Supervivientes por Suicidio de un Ser Querido «Ubuntu» y la Asociación de Profesionales en Prevención y Postvención de la Conducta Suicida «Papageno». Si necesitas ayuda contacta al WhatsApp 633 169 129.

Relatos en primera persona sobre la experiencia de la pérdida por suicidio

Grupo de Ayuda Mutua para Supervivientes
Tiempo de lectura: 3 minutos
man in black jacket standing on the seashore
Photo by Vladislav Murashko on Pexels.com

Los libros reseñados en esta entrada del blog contienen descripciones explícitas sobre conductas suicidas de especial dureza. 

Cuanto más difícil es expresar el dolor con palabras, mayor reto supone hacer dos regalos como nos hacen los autores Piedad Bonnett y Martín Sivak. Dos libros recios, duros, sin paliativos, que hablan de un tema a los que otros muchos prefieren dar la espalda: el suicidio. Ambos se internan en forma de autopsia psicológica de corte literario en la creación de una explicación íntima sobre la muerte de sus seres queridos.

Piedad Bonnett,  es escritora, ensayista, poeta y novelista nacida en Amalfi, Antioquía en 1951. Es licenciada en Filosofía y Letras de la Universidad de los Andes y profesora desde hace cuatro décadas. Tiene una maestría en Teoría del Arte, la Arquitectura y el Diseño.

El texto de Bonnet no solo describe pormenorizadamente qué significa ser supervivientes del suicidio, sino que es de una belleza y una facilidad de lectura que lo hace un libro ideal para entenderlo desde una perspectiva íntima.

A lo largo de sus páginas la autora narra las vicisitudes de la familia para acompañar a su hijo que padece un trastorno mental y su batalla por afrontarla. Su miedo y su dolor impregna cada párrafo y además de recordarnos la futilidad de la vida, de la que ninguno estamos a salvo, nos ayuda a conocer a su hijo y las circunstancias de su muerte. 

Sin sensacionalismos, pero con dureza, describe el camino que los llevó vivir en primera persona la experiencia de perder a un hijo por suicidio. 

Seguro que será un ejercicio terapéutico para la escritora y para todas aquellas personas que quieran mirar de frente este problema de salud pública que supone un reto. 

No contiene paños calientes para nadie. Sin rencor, también relata las dificultades frente al sistema sanitario de su país y todas las barreras impuestas por el estigma alrededor de los problemas de salud mental.

Muy recomendable para personas que deseen profundizar en el tema.

La Organización Mundial de la Salud viene denunciando una falta clara de medios dedicados a la salud mental que hace que en los países desarrollados del 44-70% de personas con problemas mentales no reciban tratamiento, cifra que alcanzaría casi al 90% en los paises más desfavorecidos.

Invertir en SALUD MENTAL (OMS, 2014)

Martín Sivak periodista argentino nacido en 1975. Director de EldiarioAR, licenciado en Sociología y doctor en Historia de América Latina. Escritor de libros de no ficción. Profesor de la Universidad Nacional de San Martín (UNSAM) y de la Universidad Torcuato Di Tella (UTDT). Ha publicado varios libros de investigación periodística.

En contraposición con el libro de Bonnet, Martín narra en este libro la muerte por suicidio de su padre cuando él apenas contaba con 15 años. Su libro nos zambulle en la Argentina más auténtica. En los recovecos de su narración uno llega a creer que siempre conoció a ese hombre al que el sufrimiento le hizo quitarse la vida. Un recorrido por toda la vida de este banquero marxista, preso y exiliado que no supo bajarse de un tren en el que se vio empujado a vivir y que se vio envuelto en un mundo empresarial al que ni quiso ni supo pertenecer. 

Ni héroe, ni villano, un simple ser humano que ante el escándalo provocado por la quiebra de sus negocios, además de otras causas, no supo afrontarlo de otra forma. Un relato fácil de leer que explica las causas que un hijo ve detrás de la desaparición de su amado padre. Un texto respetuoso y exento de sentimentalismos, pero humano y poderosamente arrebatador.

Ambos libros son muy recomendables, aunque no dudemos en referirnos de nuevo a su crudeza. Textos ambivalentes en un intento de sus autores de entender la sombra oscura que irrumpió en sus vidas con el fallecimiento de sus seres queridos y llevar a otra fase sus duelos. 

 

13 de enero: Día Mundial de Lucha contra la Depresión

Tiempo de lectura: 2 minutos
La Asociación de Trastornos Depresivos de Aragón es una asociación reconocida de utilidad pública destinada al tratamiento psicoterapéutico de la ansiedad, estrés, depresión y momento adaptativos complicados.

Nuestros compañeros, de AFDA han realizado este material para conmemorar este día tan importante que nosotros ayudamos a difundir. Felicidades por todo su trabajo en un problema que está tan relacionada en muchos casos con las conductas suicidas.

Suicidios en la adolescencia

Tiempo de lectura: 3 minutos

Glenn, C. R., Kleiman, E. M., Kellerman, J., Pollak, O., Cha, C. B., Esposito, E. C., … & Boatman, A. E. (2020). Annual Research Review: A meta‐analytic review of worldwide suicide rates in adolescents. Journal of child psychology and psychiatry61(3), 294-308.

Foto de Hannah Nelson en Pexels

Suicidio en la adolescencia

El suicidio en la adolescencia supone un problema de salud pública de primer orden como primera causa de mortalidad a esas edades. Catherine R. Glen y colaboradores realizan una revisión para determinar las tasas de mortalidad por esta causa en adolescentes de 10 a 19 años en países de todo el mundo.

Resumen de la investigación

El estudio recoge datos disponibles de diferentes países considerados de alta calidad de la Base de datos de Mortalidad de la Organización Mundial de la Salud y los relaciona con datos de accesibilidad a métodos letales, indicadores económicos y de desigualdad.

El resultado de la investigación es bastante heterogéneo. A nivel mundial se estima una tasa de 3,77 por 100.00 habitantes. Los países con mayores tasas fueron Estonia, Nueva Zelanda y Uzbekistán. Las tasas más altas de dieron en el grupo de edad superior en el intervalo estudiado y fue superior entre hombres.

Las desigualdades económicas correlacionaron con una mayor diferencia en el ratio entre hombres y mujeres.

Suicidio entre adolescentes en España

Según el estudio, las tasas de suicidio entre adolescentes de 10 a 19 años en España es de 1,47 por 100.00 habitantes siendo superior en el tramo de 15 a 19 años, por lo que el país está por debajo del nivel mundial. Las tasas entre hombres dobla la de las mujeres.

Suicidio entre adolescentes en México

En México los indicadores son superiores. Las tasas de suicidio entre adolescentes son de 4,81 por 100.000 habitantes con peores tasas en el grupo de mayor edad. Las muertes por esta causa son casi el doble entre hombres respecto a las de mujeres

¿Cuáles son los factores de riesgo en el suicidio de adolescentes?

La Clínica Mayo advierte de diferentes circunstancias que pueden constituir factores de riesgo para la aparición de conductas suicidas.

Entre ellos destaca la presencia de trastornos físicos o mentales o antecedentes familiares, pérdidas de seres queridos o conflictos graves, antecedentes de maltrato o abuso, consumo de sustancias, embarazo no deseado, bullying, incertidumbre sobre la orientación sexual, suicidio en su entorno cercano o ser adoptado.

Servicios de atención a la conducta suicida

Artículo completo

Annual Research Review: A meta-analytic review of worldwide suicide rates in adolescents (En inglés)

Escuela de Madres y Padres para personas que atraviesan un duelo por suicidio (supervivientes)

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Las madres y los padres (líderes) deben estar lo suficientemente cerca para relacionarse con sus hijos e hijas (otros), pero lo suficientemente lejos como para motivarlos. Lo primero les hace sentirse seguros y lo segunda les permite madurar.

Parafraseando a John C. Maxwell,

Educar a nuestros hijos e hijas es una tarea enriquecedora que a veces se vuelve dura y conflictiva. Cuando además perdemos a un ser querido por suicidio puede convertirse en un factor de estrés más que dificulte el duelo y las relaciones familiares en general.

Aprender estrategias que podamos implementar en su educación y que faciliten el tránsito de esta dura etapa para toda la familia puede ser la clave para evitar complicaciones en el proceso.

Desde nuestra vocación de servicio, la Asociación Alhelí y la Asociación de Profesionales en Prevención y Postvención de la Conducta Suicida «Papageno» ponemos en marcha una Escuela de Madres y Padres orientada a dotar de competencias a los familiares que han perdido a un ser querido que están preocupados por la educación de sus hijos e hijas.

La Escuela de Madres y Padres Se celebrará por ZOOM el día 25 de enero de 2021 con horario de 17 a 19. El enlace se enviará a los correos de los participantes seleccionados. La inscripción se realizará a través del enlace:

INSCRIPCIÓN (HASTA EL 22 DE ENERO DE 2021)

Calcula el precio de tus 20 segundos de fama

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Foto de Engin Akyurt en Pexels

El reconocimiento como necesidad humana

La teoría de las necesidades de Maslow señala la necesidad de reconocimiento como una necesidad intrínsecamente humana. Por una parte este reconocimiento implica la búsqueda del respeto de los demás, el estatus y la reputación, la fama y la gloria. Por otro lado, del respeto de uno mismo (a veces tan olvidado).

No parece que Maslow estuviera muy desacertado si observamos detenidamente nuestro alrededor. Aunque esto no es un fenómeno en absoluto novedoso. Las redes sociales han venido a corroborar esta necesidad, a veces abusiva, de confirmar nuestra propia estima validándola y exponiéndola a la opinión de los demás.

Nada ha cambiado desde tiempo de los romanos. Estos dejaron no pocas pruebas de esta búsqueda desaforada de poder y fama. Se cuenta que el «gran» Julio César en su intento de conquistar Roma y seguido por sus legionarios dejó una importante prueba de ello. Cuando atravesaba una pequeña aldea que fue objeto de las mofas de sus soldados,  y dado a dejar célebres frases para la historia sentenció:

 

«Preferiría ser el primero en esta aldea que el segundo en Roma»,

 

señalando así la importancia que le daba al status dentro de sus propios valores. Y no debió ser el único, porque el refranero español también acuñó un dicho sospechosamente parecido: 

 

“más vale ser cabeza de ratón que cola de león”,

 

que se refiere a la importancia de tener autoridad en los grupos a los que se pertenece aunque sean pequeños, frente a la posibilidad de ser un «don nadie» en los grandes.

Personas tóxicas Vs conductas tóxicas

Y es que no todos los caminos para conseguir reconocimiento son acertados. Se me ocurren varios que, al contrario, son especialmente perniciosos. Pero antes me gustaría dar un amplio rodeo para hablar de otro fenómeno. Siempre me produjo un gran rechazo visceral las teorías que postulan que muchos de nuestros males provienen de la existencia de personas tóxicas. Así se hicieron muy célebres los libros de Bernardo Stamateas. Uno de ellos, titulado «Gente Tóxica», es publicitado en Google Books con el siguiente párrafo: 

En nuestra vida cotidiana no podemos evitar encontrarnos con personas problemáticas. Jefes autoritarios y descalificadores, vecinos quejosos, compañeros de trabajo o estudio envidiosos, parientes que siempre nos echan la culpa de todo, hombres y mujeres arrogantes, irascibles o mentirosos…

No me parece una expresión adecuada. Sitúa a las personas en una posición cómoda donde el origen de sus males es externo. Pone el énfasis de la solución solo en evitar caer en sus trampas. Y para trampas, ya nos valemos nosotros solos. Me pregunto quien será el encargado o encargada de determinar si mi naturaleza es tóxica y quien le ha arrogado la capacidad de ser juez en este sentido. Y así las consultas de salud mental se llenan de personas huyendo de estas personas tóxicas. Que digo yo que alguna de los que usamos este tipo de servicios, aunque tan solo sea por probabilidad, también podríamos ser tachado de tales, o incluso los y las profesionales que los atendemos. Por eso, yo prefiero hablar de conductas tóxicas. Y por un ejercicio de falsa humildad hoy utilizaré la primera persona para referirme a una de mis conductas tóxicas.

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Nuestro maldito ego

En psicología se dice que el ser humano necesita de dos tipos de amor o afecto como vacuna de nuestra soledad. Erich Fromm los denominó amor materno y paterno. Se refería así al amor incondicional y condicional. El amor incondicional es aquel que se nos da por el simple hecho de ser personas. Se nos quiere por el simple hecho de existir. El condicional se obtiene, sin embargo, dependiendo de nuestras conductas. Es decir, se nos da por lo que hacemos o lo que damos. Ambos tipos de amor son necesarios para nuestro bienestar psicológico. No obstante, al estar este segundo condicionado y poder obtenerse a través de determinadas conductas puede acabar convirtíéndonos en meras marionetas de los que nos rodean.

Y ahora entenderán por qué les hablaba antes de mi falsa humildad. Una vez que publique esta entrada en el blog, ¿cuánto tiempo tardaré en revisar los likes en las redes sociales y las visitas al blog para validar la opinión que otras personas tienen sobre lo que escribo…? ¿Cuánto cuestan estos 20 seguros de fama? ¿Cuánto tiempo perderé por esta fútil necesidad del aplauso hueco y fácil de las redes sociales?

Como perro de Pavlov, aún no me encuentro preparado para dejar de salivar cuando suene la campana, en este caso un like o una visita más, y no podré evitar una sonrisa (casi idiota) si me llueven los corazoncitos en las redes.

El suicidio y la falta de reconocimiento

El sábado fue el día Internacional del Superviviente por Suicidio. Permítanme otra digresión, porque debería llamarse también de la superviviente. Nunca he sido muy exagerado con este tema, pero el lenguaje acaba siendo la primera barrera para la igualdad efectiva entre sexos y las diferentes formas de vivir la sexualidad en nuestra especie.

Pues esa tarde, tuve la oportunidad de hablar un rato con una de las supervivientes que ha perdido a un ser querido por suicidio. Impagable. Jamás podré pagar la oportunidad de haber conocido a estas personas con las que ahora comparto parte de mi vida. Cuando la vida me lleve a otro lado, las llevaré a todas conmigo.

Llevo un tiempo obsesionado con la idea de vencer mi propio ego y en esta conversación acabó saliendo el precio que tenemos que pagar por darle de comer a este terrible monstruo, convidado de piedra, que tiene por costumbre convertirse en el muerto en el entierro y la novia en la boda. Nos hace esclavos del relato en primera persona y nos regala diez segundos de fama a cambio de una pesada mochila llena de piedras que no nos pertenecen.

Como no, con la persona que hablé ayer, también hubo palabras y recuerdos para los que ya no están, para aquellos que tanto nos cuesta entender, que aún teniéndolo en muchos casos, sintieron ser nadie y marcharon faltos de toda esperanza. 

Terrible, porque muchas veces he pensado que esta terrible necesidad nuestra puede estar detrás de muchas conductas suicidas en personas vulnerables. Esa necesidad atávica de sentirnos parte de un grupo e importantes dentro de él, como fuerza de supervivencia grupal, para reivindicar nuestro derecho a estar vivos, de ser útiles para la manada. Esa fuente de displacer para personas vulnerables que les hace sufrir y les hace tomar decisiones fatales.

Foto de Prateek Katyal en Pexels

Internet, redes sociales y necesidad de reconocimiento

En ese sentido, la realidad virtual paralela en que nos vemos envueltos y en la que nos hemos sumergido especialmente durante la crisis sanitaria por COVID-19 ha venido a reforzar la idea equivocada de que podemos alimentarnos y llenarnos con el amor cibernético de corazones en la nube, abrazos de wi-fi, emoticonos y otras perversiones digitales. Y nos creemos los reyes del filtro de Instagram y del espectáculo de Tik-Tok. Algunos, los más viejunos nos creemos importantes influencer de Facebook u a otras tantas redes que ya desaparecieron y de las que fuimos princesas por un día.

Todo para combatir nuestro peor miedo, la soledad no elegida, aquella que nos consume, que a muchos nos lleva a la depresión y a tantos ancianos y ancianas le acercó al final de su vida en su peor versión. Y que señala la incapacidad de nuestra forma de entender la vida en la sociedad actual para cubrir nuestras necesidades psicológicas más básicas.

Y ahora recuerdo a tantas personas que me confiaron sus secretos, su más interno sufrimiento, el miedo a la soledad, a no ser capaz de afrontarla. Me pregunto si no sería mejor volver a la aldea, a esa que César defendió de las risas de sus propios soldados, y aprender a disfrutar de las pequeñas cosas, sin más pretensiones que ser yo mismo, olvidándome del peso de ser cabeza de ratón o de los miedos de ser cola de león.

Bueno, os dejo y no olvidéis dar al like (hoy te pido que no lo hagas)…

La asociación malagueña Alhelí se adhiere a papageno.es

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La Asociación Alhelí es una asociación altruista y sin ánimo de lucro. Su labor ha sido reconocida con el Premio Málaga Voluntaria en 2018 en la categoría de asistencia social y el Premio Farola 2019, en la categoría Justicia Social y Solidaridad del Instituto Andaluz de la Mujer.

Ofrece en Málaga desde hace más de 4 años, un acompañamiento durante el proceso de duelo de forma gratuita y sostenida en el tiempo a todos aquellos dolientes que nos necesitan. A nivel institucional ningún sistema de salud público en España tiene implementado un programa de «apoyo de acompañamiento al duelo» para las personas que están atravesando este proceso.

Aunque se trate de un proceso natural que el ser humano tiene que pasar, seguir adelante sin ayuda es complicado y las consecuencias de no poder transitarlo adecuadamente impactan negativamente, perjudicando todas las áreas de la vida de los dolientes.

La acción social ofrecida por la Asociación, pionera en Andalucía, va dirigida a toda persona que sufra o que haya sufrido algún tipo de pérdida y necesite apoyo profesional y social durante el proceso de duelo, para así poder afrontar y sobrellevar esta difícil situación previniendo el duelo patológico, mejorando su calidad de vida y evitando el aislamiento social.

Desde la asociación se ofrece atención psicológica individualizada,  acompañamiento social a través del grupo de ayuda mutua y la organización de actividades socioculturales. En la actualidad trabajamos con familiares y seres queridos de personas que pierden la vida por: Suicidios, Accidentes, Ahogamientos, Enfermedades, Muerte súbita, etc. 

Logotipo Papageno.esPapageno.es es una plataforma de carácter independiente y no lucrativa. Nació en 2019 fruto del esfuerzo de un grupo de profesionales con vocación de servicio y activismo social con el objeto de prevenir el suicidio.

Desde sus inicios se mueve desde la ilusión de unir esfuerzos de los profesionales y organizaciones preocupadas por el impacto que el suicidio provoca en nuestra sociedad. Este impacto no está marcado solo por el número de víctimas mortales, sino por el sufrimiento de las personas y colectivos más vulnerables, y entre ellos el de las personas que afrontan un duelo por suicidio (supervivientes).

Desde la filosofía de la lucha contra el estigma y el tabú, tiene como objetivos la sensibilización de la sociedad y de los colectivos profesionales, con especial atención a la formación y empoderamiento de personas y colectivos.

Con esta adhesión ambas organizaciones hacen público su deseo de colaborar en la prevención del suicidio desde el máximo respeto a su independencia en defensa del colectivo al que representan, a sus estatutos y con el único objetivo de aprender juntas. 

Si deseas inscribirte como socio de esta asociación o adherirte a su proyecto puedes contactar a través de: ENLACE

 

MÁS INFORMACIÓN

Teléfono: 645 68 88 90
Email; asociacionalhelimalaga@gmail.com
Facebook: @asociacionalheli 
 
PAPAGENO.ES
WhatsApp: 633 169 129
Email: prevencion@papageno.es
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Papageno.es y Ubuntu inician un grupo de ayuda mutua para supervivientes de suicidio en Sevilla

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La Asociación Andaluza de Supervivientes por Suicidio «Ubuntu«, de reciente creación, y la Asociación de Profesionales en Prevención y Postvención en Conductas Suicidas «Papageno» inauguraron el pasado jueves 24 de septiembre un grupo de ayuda mutua (GAM) para supervivientes por suicidio en la provincia de Sevilla.

En la sede de Papageno en San Juan de Aznalfarache (Sevilla), celebraron la primera sesión del GAM de forma presencial. Durante unos meses, como consecuencia de la crisis sanitaria por la COVID-19, estas sesiones se celebrarán mensualmente por videoconferencia.

Ubuntu, una asociación independiente y sin ánimo de lucro, constituida exclusivamente por supervivientes y en proceso de registro, inicia su andadura con el objetivo de dar apoyo a personas de toda Andalucía que hayan perdido a un ser querido por suicidio. El estigma, el silencio, los mitos y el tabú han obligado a estas personas a vivir este problema de forma aislada lo que en muchos casos ha exacerbado los problemas emocionales.

Nacida en el seno del grupo de ayuda mutua abierto en Cádiz el pasado año por papageno.es, tiene el compromiso y la ilusión de convertirse en un referente para la acogida de supervivientes en la comunidad autónoma andaluza

La culpa, la búsqueda de razones de lo ocurrido, la vergüenza por el estigma, la rabia… convierten el duelo por suicidio en especialmente doloroso. En estos casos, además de acudir a profesionales de salud mental para recibir apoyo cuando se considera necesario, la OMS y otras instituciones recomiendan la participación en Grupos de Ayuda Mutua.

Estos grupos tienen un doble objetivo. Por un lado, crean espacios seguros para la expresión de emociones. En muchas ocasiones es difícil encontrar a personas para hablar de suicidio y estos grupos son un lugar propicio para ello. Por otro lado, permiten el aprendizaje de recursos para afrontar de forma adecuado el duelo y evitar que se cronifique en el tiempo.

Ambas asociaciones nacidas de forma paralela, se hermanan con el objetivo de facilitar la accesibilidad de los supervivientes a recursos de salud mental efectivos para apoyar su duelo y reivindicar la necesidad de mejorar la atención en este tipo de problemática. 

 


Si eres superviviente y necesitas ayuda, escríbenos a: supervivientes@prevencionsuicidio.school, prevencion@papageno.es o a través del WhatsApp 633 169 129

Logotipo Papageno.es

 

 

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